La barrica de roble es un símbolo universal del mundo del vino y la enología. En ella, los vinos pasarán diferentes estancias de tiempo, donde evolucionarán y se perfeccionarán gracias a los matices del roble, en combinación con las características de cada variedad y el trabajo realizado en bodega. Así, es un elemento muy importante en la elaboración de vinos de calidad, pero, ¿por qué es tan importante para los vinos la crianza en barrica? Te lo contamos a continuación.
Roble: ¿francés o americano?
El roble es un material de propiedades únicas para la elaboración de vino. Según el tipo de barrica elegida, su material puede aportar elegantes notas de vainilla, especias o taninos suaves. Dos de los tipos más utilizados son el roble francés y el roble americano, cada uno con su personalidad única que influirá en el carácter final del vino.
En ENATE utilizamos roble francés y roble americano en barricas de 225 litros. El roble francés es conocido por tener poros más finos, y una estructura más compacta y suave al tacto, en comparación al roble americano, que tiene poros más grandes y una estructura más porosa, y una superficie más basta. En términos de aromas y sabores, el roble francés tiende a aportar aromas sutiles y elegantes al vino, con notas de vainilla, especias, y a veces un toque floral. A su vez, ayuda a suavizar los taninos del vino y a aportar una estructura más refinada. El roble americano, por su parte, aporta aromas más intensos y pronunciados, como clavo de olor, especias, o incluso notas de coco, y durante la crianza agrega más cuerpo y estructura al vino. Debido a la delicadeza de las barricas de roble francés, suelen ser las elegidas para crianzas largas, ya que su madera permite una oxidación más lenta y controlada.
La fermentación en barrica
Y aunque las barricas son conocidas por el tiempo que el vino pasa en ellas para su crianza, la barrica también puede albergar el proceso de fermentación alcohólica, donde el mosto se convierte en vino gracias a las levaduras. Es el caso de nuestro ENATE Chardonnay fermentado en barrica, uno de nuestros blancos más complejos, y resultado de un trabajo impecable llevado a cabo con las lías y su crianza en barrica. Asimismo, tras esta fermentación alcohólica, los vinos tintos pueden realizar la fermentación maloláctica en barricas (o también en acero inoxidable), mediante bacterias que transforman el ácido málico en láctico. Una fermentación que realizan todos los tintos y solo en elaboraciones concretas los blancos, como el caso de ENATE Chardonnay fermentado en barrica.
La fermentación del vino en barrica, a diferencia de la fermentación en depósitos de acero inoxidable, supone un contacto directo entre el vino y la madera, donde esta le aporta taninos, ligninas y otros compuestos aromáticos, que pueden agregar complejidad y estructura al vino.
Además, las barricas no son herméticas, por lo que permiten una oxigenación controlada del vino a través de los poros de la madera, algo que puede ayudar a suavizar los taninos y promover una fermentación más completa. Sin embargo, esta condición también puede ser un problema a lo largo de la fermentación y el envejecimiento ya que, al no ser recipientes herméticos, puede haber una entrada de aire y oxígeno, que provocaría una oxidación del vino. Por ello, es importante mantener un control constante.
Este proceso también puede potenciar la extracción de compuestos aromáticos y sabores de la madera, como la vainilla, las especias, los tostados y los ahumados, que se integran más fácilmente en el vino y dan lugar a perfiles más complejos y ricos en matices. En términos de estructura del vino, la barrica puede agregar cuerpo mientras suaviza la sensación en boca, dando lugar a un carácter más aterciopelado y redondo del vino.
Realizar la fermentación en barricas de roble implica costos más altos y una logística más compleja, en comparación a la fermentación en tanques de acero inoxidable. Además, la limpieza y mantenimiento de las barricas puede ser más laborioso. Sin embargo, este proceso nos da como resultado un vino con características sensoriales únicas, incluyendo aromas y sabores de la madera, una textura más suave y una estructura más compleja. Por eso, en ENATE elegimos siempre la excelencia y el trabajo minucioso para dar lugar a vinos de calidad, de un perfil único y con la propia esencia del Somontano.
Tiempos de estancia en barrica durante el proceso de crianza
La crianza en barrica es también la clave para la denominación comercial de los diferentes tipos de vinos. En la Denominación de Origen Somontano, los vinos tintos crianza, como ENATE Crianza deben tener, como mínimo, 24 meses de envejecimiento, 6 de los cuales en barrica de roble. Los tintos reserva, como ENATE Reserva, pasarán una crianza mínima de 36 meses, siendo 12 de ellos en barrica de roble. Finalmente, los tintos gran reserva cuentan con un periodo de 60 meses, 18 de ellos en barrica de roble. Los tiempos para blancos y rosados son ligeramente inferiores, y también están sujetos a cada Denominación de Origen.
En ENATE, además, contamos con nuestra gama Premium ‘Monovarietales’, compuesta por nuestros tintos más sofisticados, con crianzas en barrica de entre 15 y 18 meses: ENATE Cabernet-Cabernet, ENATE Merlot-Merlot, ENATE Syrah-Shiraz, y ENATE Varietales.
Las condiciones para la crianza
La cava de barricas es el lugar donde los vinos realizan su crianza, y donde pasarán entre 7 y 18 meses envejeciendo. Durante todo este tiempo, es esencial mantener una temperatura y una humedad controladas, para asegurar unas condiciones ideales para las crianzas. ¿Sabías que, en ENATE, nuestra cava de barricas puede albergar hasta 4.000 barricas? Allí, la humedad ideal es de aproximadamente el 80%, para evitar que la madera se cuartee por exceso de sequedad, y la temperatura recomendada estaría entre 8ºC y 18ºC, siempre de manera estable y sin cambios bruscos.
La crianza en barrica es un proceso muy importante en la elaboración del vino, que determinará en gran medida la personalidad y el carácter de cada vino, según la técnica, los criterios y los materiales utilizados en el proceso.
Si quieres descubrir las diferencias entre los tipos de crianza en barrica, accede a nuestra boutique online y cata por ti mismo nuestros ENATE Crianza, ENATE Reserva o nuestros Monovarietales. Y si quieres descubrir la cava de barricas de nuestra bodega, consulta nuestra oferta enoturística y ven a visitarnos en cualquiera de nuestras experiencias. ¡Te esperamos!