Si hay algo que caracteriza a las mesas de Navidad es la abundancia de postres. Desde los típicos turrones de almendra, yema o chocolate, hasta los polvorones, pasando por los frutos secos o las tradicionales frutas deshidratadas, que parece que en estas fechas nos gustan más. Y no podemos olvidarnos, por supuesto, del afamado roscón de Reyes… Habitualmente, el momento de comer todos estos dulces llega con el café, pero ¿has probado a maridar los postres de Navidad con vino?
Aquí te dejamos seis ideas de maridaje con las que triunfarás en las mesas de Navidad. Maridajes de vino y dulces sorprendentes con los que potenciar los postres más típicos navideños, para disfrutar al máximo de las experiencias gastronómicas estos días. Porque el objetivo es resaltar las características de cada postre, combinando intensidad de sabores, grado de acidez o temperatura y azúcar de los mismos, para conseguir maridajes redondos. ¿Sabías que cuanto más intensos sean los sabores de nuestro postre, más cuerpo y potencia necesitará tener el vino con el que vayamos a maridarlo? ¡Toma nota!
Porque los tintos también maridan con postres de Navidad
- Si en tu casa nunca falta el turrón de yema tostada, prueba a maridarlo con ENATE Reserva. Y es que el azúcar quemado marida a la perfección con los aromas a tostados y a madera que le aporta el vino. Un turrón sobrio y delicado para un vino equilibrado y de elegante aromas especiados. En definitiva, un perfecto equilibrio de aromas tostados que no deja a nadie indiferente.
- ¿Sois unos chocolate lovers? Entonces os encantará la combinación del chocolate negro (mejor si tiene al menos un 70% de cacao), con un ligero toque de sal marina (que se puede encontrar en supermercados y pastelerías especializadas), maridado con ENATE Merlot-Merlot. Un chocolate de intenso sabor, con un vino de cuerpo robusto y completo, que va directo a los sentidos.
- ¿Qué te parece acompañar el tradicional roscón de Reyes, con su nata y todo, con un ENATE Cabernet-Merlot? Seguro que no habías imaginado tomar el roscón con una copa de vino tinto. Un maridaje sorprendente, gracias al equilibrio y la acidez de este tinto que contrasta con las mantequillas, azúcares y grasas de la nata, para darnos un bocado más redondo.
Entre los blancos, Chardonnay y Gewürztraminer en sus diferentes elaboraciones
- Para un melocotón, otro melocotón. Es el caso del maridaje de orejones y ENATE Chardonnay 234. Este blanco muestra un complejo e intenso aroma varietal de melocotón maduro, y también de manzana verde, hinojo y frutas exóticas. Un vino fresco que acompaña muy bien a los orejones, por la similitud de sus aromas, ganando en cuerpo y cremosidad a su paso en boca.
- Y como hasta los grandes clásicos pueden innovarse, te proponemos el tradicional ‘músico’, ese famoso postre elaborado a base de frutos secos y una copita de moscatel, pero en esta ocasión con una copa de ENATE Gewürztraminer dulce. Un blanco glicérico, goloso y refrescante al mismo tiempo, cuyas notas tostadas y especiadas, que le aportan la barrica, maridan muy bien con las almendras, avellanas o nueces propias de este postre.
- Seguimos con los tostados. Te proponemos un pastel ruso, elaborado a base de avellana, almendra, clara de huevo y praliné de mantequilla, maridado con ENATE Chardonnay Fermentado en Barrica. Un blanco de aroma complejo y exuberante en el que se funden el carácter varietal, con aromas de avellana y pan tostado, con notas de fruta tropical y con los toques ahumados aportados por la crianza en barrica. Un contraste de excelente equilibrio entre los tostados de ambos, donde potenciar sus cualidades.
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