El arte es universal y también lo es ENATE. La esencia de la bodega, encerrada en cada gota, impresa en cada etiqueta, se disfruta en cuatro continentes. No importa en qué mesa de qué país se abra una botella de ENATE, porque su calidad, nuestra identidad, son inalterables.
Nuestros vinos se consumen en todo el territorio nacional. ENATE también está presente en 48 países de Europa, Asia, América y Africa.